A ser niño en un mundo de mayores
A no elegir el lugar adecuado
A pensar si estuviera equivocado
A no esperar a los tiempos mejores
A preferir un mundo de colores
A no seguir los patrones marcados
A encontrar los caminos embarrados
A que nadie comprenda mis amores
A despertar en lugar diferente
A gritar y pasar inadvertido
A no entender lo que dice la gente
A sentir un silencio no querido
A verme viejo y solo, de repente
A morir, olvidando lo vivido
Qué bonito.
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Como me ha gustado… aunque me sorprendiste, no sueles escribir así.
Por cierto, nos debes el final de la historia de la elección de novios 😉
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Para qué elegir pudiendo disfrutar con todos ellos. Jeje ya se irán cansando… el que más aguante ese será el elegido
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Ja ja… eso es un poco de trampa pero si, es una opción!
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